La historia de los correos en los estados modernos

La historia de los correos en los estados modernos. Hoy en día todos usamos el mail para mandar correos a cualquier parte del mundo, y lo hacemos sin darnos cuenta de lo rápido que ha cambiado todo, porque hasta hace pocos años, el servicio de correos era uno de los más importantes en cualquier ciudad o pueblo y hoy parece que los buzones son olvidados recuerdos que adornan las esquinas de nuestras ciudades.

La historia del servicio de correos en los estados modernos

La historia de los correos en los estados modernos. Desde hace más de 3000 años se tienen noticias de algún sistema de correo entre distintas ciudades, algo imprescindible para poder mantener un sistema de gobierno y de comercio. El verbo griego epistelein significa enviar un mensaje y recibir epístolas o cartas es una expresión bastante común en nuestro lenguaje popular.

La historia del servicio de correos en los estados modernos

En la Edad media, se tienen indicios en distintas ciudades europeas de servicios de correos más o menos complejos que mantenían a los gobernantes ocupados en conseguir siempre el mejor sistema de transmisión de mensajes al servicio de la corona, desde la transmisión de ordenes hasta las citaciones judiciales o la recepción de informes.

Las expresiones utilizadas en el mundo de los correos. La historia del servicio postal esta inserta en las propias palabras que lo designa. La palabra mensajero procede del occitano corrieu , compuesto del término corlieu (correr) y lieu (lugar).

Los correos irían a veces andando y otras veces corriendo, como el griego Filípides, precursor del maratón, aunque mayoritariamente se usaron las caballerías. De hecho el conjunto de caballerías para el servicio de correos recibió el nombre de postas que procede del latín ponere,  que se traduce por poner y que llegó al castellano de la mano del italiano allá por el siglo XVI. La palabra postas se empezó a utilizar para denominar el lugar donde se colocaba el caballo en el establo. El término ‘postal’ se empezó a utilizar a mediados del siglo XIX cuando el estado comenzó a organizar el servicio de correos.

El estado y el servicio de correos. La edad moderna no hubiese sido posible sin un servicio de postas perfectamente organizado, de hecho un estado central se debe a la calidad y eficacia con  la que es capaz de mantener conectado todo su territorio. El esfuerzo de las distintas administraciones por organizar y mantener un servicio de correos eficiente ha sido una máxima durante siglos. Estos servicios de correos contaban con la ayuda de cientos de estudios financiados por las distintas monarquías y que iban desde guías de caminos, mapas, o nomenclátor de lugares. Por ejemplo, el mapa de isócronas, que apuntaba las horas medias de viaje de los correos reales desde Londres a otros puntos de Inglaterra y dónde se muestra que en unas 10 horas se podía alcanzar un radio de 100km o en 80horas se llegaba a la frontera con Escocia.

A medida que los estados iban creciendo, la importancia de los servicios de correos se hacia más notoria, se acometieron multitud de reformas y se comenzaron a realizar concesiones a particulares para  mejorar el servicio. España fue de los primeros países que centralizó el servicio de correos en manos del propio Estado.

A parte de mantener un servicio de postas y mensajeros era también imprescindible mantener y ampliar un sistema de caminos y carreteras seguro y accesible, así como guías de caminantes, libros de distancias y mapas de itinerarios generales y provinciales. Esto, que hoy a nosotros nos parece tan sencillo como teclearlo en una pantalla de ordenador era una información de incalculable valor hasta hace muy poco tiempo. Pero no sólo eran los caminos y carreteras una información importante para mantener un servicio de correos eficiente, también era importante conocer el nombre de los pueblos y ciudades dispersos en toda la geografía política de un estado. En España, el conde de Floridablanca ordenó en 1785 la realización del Nomenclator de los pueblos de España, que como bien se reconocía en aquellos tiempos era algo que no estaba bien definido, y que era sumamente importante para mantener un correcto sistema de tributos.

La historia del servicio de correos es sumamente interesante, sobre todo si hacemos una perspectiva desde nuestra forma de vida actual, en la que sólo necesitamos teclear una dirección para comunicarnos en vivo con cualquier persona en cualquier lugar del mundo. El potencial de las redes de comunicación actual es algo que probablemente todavía no hayamos valorado en su justa medida, no sólo es hablar con un amigo a 5000 kilómetros de distancia, es también intercambiar información en tiempo real, información que, en principio, esta libre de manipulaciones y censuras.

La historia de los correos en los estados modernos

La historia del servicio de correos en los estados modernos