Lámparas de larga duración que no son lámparas LED

Lámparas de larga duración que no son lámparas LED. Últimamente estamos acostumbrados a escuchar las grandes ventajas que ofrecen las luces LED. Sin duda, la tecnología LED ha venido para quedarse y es una alternativa muy interesante para iluminación, sobretodo para los hogares, donde el consumo de electricidad derivado de la luz es muy alto.

Casi ya no merece la pena hablar de las lámparas incandescentes, que han dominado el mundo de la iluminación durante muchas décadas. Lámparas que consumían mucha energía y que tenían una duración muy baja, además de ser poco eficientes ya que se fundían con demasiada frecuencia, lo que era un problema. Las luces incandescentes están desapareciendo poco a poco y dentro de nada serán sólo un vago recuerdo.

Pero, cuando hablamos de duración de las lámparas, no nos tenemos que quedar sólo con la bombillas LED, hay más alternativas, aunque, a veces no todas son apropiadas para la iluminación cotidiana de nuestros hogares.

Las bombillas LED no tienen por qué ser las más eficientes

Lámparas de larga duración que no son lámparas LED.

Empecemos con buscar alternativas a las lámparas fluorescentes. Las lámparas fluorescentes son muy utilizadas en grandes espacios interiores: oficinas, salones, centros públicos, etc… En muchas de nuestras cocinas hemos puesto alguna vez una lámpara fluorescente. Las lámparas fluorescentes son eficientes y baratas, resultando una opción muy interesante frente a las incandescentes e incluso frente a los halógenos.

Hay una versión optimizada de la lámpara fluorescente que aumenta la eficiencia de estas. Se trata de las lámparas fluorescentes encapsuladas. La protección se consigue mediante una cápsula metálica y una capa de mica en el interior de la bombilla. Estas lámparas pueden reducir hasta un 12% el consumo de energía durante su vida útil y reducir hasta en 150kg las emisiones de CO2. Se trata de lámparas especialmente indicadas para downlights.

Las lámparas de sodio a alta presión, líderes en la iluminación exterior.

Para iluminación exterior, donde el LED todavía no se ha impuesto, siguen dominando las lámparas de sodio a alta presión. Líderes indiscutibles en este sector de la iluminación de grandes espacios públicos, y esto gracias a la increíble vida útil de este tipo de lámparas. Más de 70.000 horas